Existen muchas causas por las cuales no logras bajar de peso y no te has dado cuenta, como usar aderezos en exceso o consumir frutos secos (nueces o almendras) a libre demanda. Pero una causa muy común es el consumo de bebidas alcohólicas.
Los estudios muestran que beber en exceso puede bloquear la quema de grasa y dificultar la pérdida de peso.
Esto se debe a que cuando bebes alcohol, tu cuerpo lo metaboliza antes que otros nutrientes para usarlo como combustible o fuente de energía.
Esto puede hacer que la quema de grasa sea muy lenta y hacer que los carbohidratos, proteínas y grasas adicionales en tu dieta se almacenen como tejido graso, lo que resulta en un exceso de grasa corporal.
El consumo excesivo de alcohol también puede disminuir la descomposición de las grasas y aumentar la síntesis de ácidos grasos, lo que lleva a la acumulación de triglicéridos en el hígado. Con el tiempo, esto causa una afección llamada enfermedad del hígado graso.
Esto no solo puede tener efectos perjudiciales en tu cintura, sino también graves consecuencias en lo que respecta a su salud.
Varios estudios han demostrado que beber con frecuencia podría estar relacionado con un riesgo moderado de aumento de peso.
Fuentes:
http://ciencia.unam.mx/assets/ciencia-para-chavos/04-ciencia-para-chavos-alcohol-guia.pdf
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